Las enfermedades que se manifiestan en los ojos y sus síntomas

Actualizado el 24/06/2022

Tanto si lo has vivido como si lo has visto en la gente de tu entorno, seguro que eres consciente de que los ojos son una parte del cuerpo muy propensa a desarrollar enfermedades. Más allá de los típicos problemas de la vista, como la miopía o el astigmatismo, se pueden generar complicaciones como la conjuntivitis, las úlceras, las cataratas, o, incluso, el glaucoma. Por eso es realmente importante acudir con regularidad a tu oftalmólogo de confianza para revisiones periódicas, y también no descuidar jamás la higiene y el cuidado ocular en el día a día, sobre todo si usas lentes de contacto o tienes tendencia a sufrir complicaciones en esta zona. ¡Recuerda que solo tenemos dos ojos para toda la vida!

Pero ¿sabías que algunos de los problemas oculares son síntoma de algo más grave? Hay determinadas enfermedades que se manifiestan en los ojos. Es decir, un trastorno visual puede llevar asociado, y ser síntoma, de una enfermedad más amplia. A continuación analizaremos las enfermedades oculares más comunes y explicaremos de qué otras patologías pueden ser síntoma. En general, la mayoría de los pacientes acuden a la consulta del oftalmólogo para tratar el problema concreto del ojo, sin ser conscientes de que puede ser signo de algo más. De ahí la importancia de acudir de manera regular al oftalmólogo, ya que no solo resolverá el trastorno ocular, sino que durante la revisión también podrá detectar otras enfermedades que se manifiestan a través de síntomas oculares.  Solo estando informados de las posibilidades detrás de las enfermedades de la vista podremos actuar en consecuencia, facilitando la detección precoz de la enfermedad y agilizando el tratamiento para fomentar la mejoría.

Enfermedades que afectan a la vista

Como comentábamos, los ojos son un órgano diana para diferentes enfermedades, es decir, los primeros síntomas de algunas patologías pueden aparecer como problemas oculares. En general, estas enfermedades son principlmente de origen autoinmune. Las manifestaciones en los ojos de estas enfermedades se entienden como problemas de la vista en sí mismos: los pacientes suelen acudir al oftalmólogo sin sospechar que se trate de un síntoma de otra enfermedad.

Enfermedades autoinmunes que afectan a los ojos

En las enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide, el lupus, la esclerodermia o las espondiloartropatías seronegativas, se produce una agresión por parte de las defensas del cuerpo en los tejidos propios. Esto puede afectar a diferentes partes del cuerpo, y, uno de los órganos más habituales son los ojos. Las manifestaciones oculares pueden variar, pero las más comunes son:

• La uveítis: inflamación de la capa intermedia del globo ocular, llamada la úvea. Puede afectar al iris, al cuerpo ciliar o a las coroides.
• Vascullitis retiniana: inflamación de los vasos de la retina generando disminución de la visión con dolor leve-moderado.
• Escleritis: inflamación muy grave de la esclerótica, esa capa dura, blanca y fibrosa que protege el ojo. Igual que muchos de estos problemas, puede poner en riesgo la visión.
• Úlceras en los ojos: heridas abiertas en la córnea, la parte que cubre el iris y la pupila. Se presentan como un punto grisáceo o blanquecino y la conjuntiva puede estar muy rojiza.
• Síndrome del ojo seco: reducción o ausencia de lágrimas, generando sequedad y picor en el ojo. Este problema puede estar asociado a muchas otras causas cotidianas, como la edad, exposición al sol o a un ambiente excesivamente seco, el tabaquismo o el uso de lentes de contacto, por eso suele ser uno de los síntomas más difíciles de asociar a una enfermedad autoinmune.
• La queratitis: inflamación de la córnea, que es el tejido que cubre la pupila y el iris. Esta inflamación genera ojo rojo, dolor y sensación de arenilla.
• La queratoconjuntivitis y otras conjuntivitis no infecciosas: inflamación en la conjuntiva y la córnea del ojo, provocando una sensación desagradable de arenillas, ardo, prurito o congestión. Puede incluso generar fotosensibilidad y visión borrosa debido a la sequedad y disminución del lagrimeo.

Otras enfermedades de los ojos que pueden ser síntoma de un problema mayor

Además de los problemas de la vista asociados a las enfermedades autoinmunes, hay otras patologías oculares que también suelen ser síntoma de algo aún más profundo y complejo. Pueden ser infecciones en cualquier parte del cuerpo que pueden llegar a ser muy graves, como la toxoplasmosis o la tuberculosis, enfermedades cardiacas o neurológicas, o, incluso, un cáncer, aunque esto es más infrecuente.

Diagnóstico y valoración

El diagnóstico y valoración global de una afectación ocular por parte del oftalmólogo permite que a través de ese problema ocular pueda detectar y diagnosticar otras enfermedades y así tratarlas a nivel ocular y a otros niveles, si la enfermedad afecta a otros órganos. En este caso, el oftalmólogo diagnostica la enfermedad y orienta y deriva al paciente a otros compañeros (especialistas en medicina interna, en reumatología, etc. ), en función de la enfermedad; de ese modo el paciente puede recibir un tratamiento global.